Guía de cuidado de flores


    Preparar un jarrón

    Elige un jarrón limpio y lávalo bien con agua caliente y jabón. Llénalo hasta dos tercios de su capacidad con agua limpia. Agrega el fertilizante que viene con el ramo.

    El alimento para flores contiene nutrientes esenciales para sus flores, un acidificante para equilibrar el pH del agua y un agente esterilizante para prevenir el crecimiento bacteriano, lo que ayuda a que sus flores se mantengan hermosas por más tiempo. El sobre es biodegradable.

    Desempaque sus flores

    Lleva tus flores al fregadero. Retíralas con cuidado del envoltorio, manteniéndolas en su bolsa de agua. Coloca la bolsa de agua en el fregadero, desenvuelve el celofán y deja escurrir el agua.

    Los materiales de embalaje se pueden reutilizar o reciclar.

    Consejo importante: deje las flores atadas juntas para preservar el hermoso arreglo creado por su florista.

    Preparar los tallos

    Recorta los tallos para que tus flores absorban mejor el agua. Con unas tijeras de podar, corta unos 2 cm de cada tallo en un ángulo de 45 grados. Si no tienes tijeras de podar, usa tijeras afiladas o un cuchillo.

    El corte en ángulo evita que los tallos queden planos en el fondo del jarrón y facilita la absorción de agua.

    Consejo importante: retire las hojas que se encuentren debajo de la línea de flotación en el jarrón, ya que pueden pudrirse y promover el crecimiento de bacterias.

    Organiza y coloca tu ramo

    Coloque el ramo en el jarrón preparado. Busque un lugar ideal, alejado de la luz solar directa, corrientes de aire, fuentes de calor y frutos en maduración (que liberan gas etileno que envejece las flores).

    Evite colocar flores cerca de radiadores, alféizares o corrientes de aire directas. Durante los meses de verano, procure mantener la zona fresca para prolongar su frescura.

    Mantenga sus flores frescas por más tiempo

    Cambie el agua cada dos días, corte los tallos cada vez y retire las flores marchitas lo antes posible. Esto previene la proliferación de bacterias y ayuda a que su ramo se mantenga vibrante el mayor tiempo posible.